Pasta exfoliante Manuka Tree de Ziaja

Hace pocos meses Ziaja lanzaba al mercado una nueva línea de cuidado facial, específico para pieles grasas y yo compré bastantes de esos productos, ya que en verano es cuando más problemas tengo para controlar mis problemas de grasa en la piel.

Os tengo que hablar de la línea al completo, pero hoy quiero centrarme en la pasta exfoliante. Se trata de un producto destinado a una limpieza más profunda de la piel. La marca nos indica sobre ella que:

- Reduce eficazmente las imperfecciones

- Previene la formación de puntos negros

- Tiene propiedades astringentes y exfoliantes

- Desbloquea los poros y reduce el exceso de sebo.

Viene en un envase de tubo de plástico que resulta muy práctico e higiénico, contiene 75 ml. y tiene un precio de 3´49 €

Las indicaciones que la marca hace a cerca de cómo usar el producto, coinciden con la aplicación que haríamos con cualquier exfoliante tradicional. Te humedeces el rostro, te aplicas una cantidad de producto, lo masajeas para exfoliar bien la piel y lo retiras con agua. Usándolo así, para mí, es un exfoliante que está bien, sin más.

Ahora bien, gracias a Arroin80 descubrí que además de como exfoliante, podía usarse a modo de mascarilla y que el producto, podía cumplir una doble función. Yo no soy nada amiga de los productos que sirven para varias cosas al mismo tiempo, porque la experiencia me dice que la mayoría de las veces, no cumplen demasiado bien ninguno de los aspectos que quieren abarcar. Casi siempre obtengo mejores resultados usando productos que de manera individual se ocupan de algo en concreto.

En este caso, tengo que decir que esta pasta exfoliante es un producto muy versátil y que al menos en mi caso cumple a la perfección con esa doble función de exfoliación y mascarilla purificante. No solo es versátil por esa doble función, sino también, porque dependiendo del modo en que se use el exfoliante puede resultar más o menos suave.

¿Cómo lo uso yo?...

Partiendo de la base de que me gustan los exfoliantes potentes, como más me gusta usarlo es aplicando el producto sobre el rostro en seco y masajeándolo bien, incidiendo sobre todo en las zonas que tengamos más problemáticas. A continuación, en lugar de aclararlo, lo dejo secar en el rostro como haría con cualquier mascarilla de arcilla y finalmente lo retiro con agua, una vez que el producto ha secado.

De este modo la exfoliación es bastante fuerte y por lo tanto no hay que abusar de ella. Yo pese a tener la piel mixta-grasa no soy amiga de los exfoliantes diarios y solo me exfolio el rostro cuando siento que lo necesito. Yo no me aplicaría este exfoliante tal y como lo hago, más allá de una vez a la semana o cada 10 días. De todos modos ya sabéis que cada piel es un mundo y lo bueno que tiene este producto es que puedes usarlo de diferentes modos, adaptándolo a las necesidades que tú tienes.

Por ejemplo para una piel sensible, por muy grasa que sea, yo no le aconsejaría aplicar el producto en seco y masajearlo. O bien lo usaría como un exfoliante tradicional, o bien lo usaría como mascarilla y lo humedecería un pelín al final para realizar una exfoliación más suave. Eso ya es cuestión de ir probando y testando que le va mejor a vuestra piel.

¿Recomiendo probarla?...

Sí. Es uno de los productos de Ziaja que considero que vale la pena probar.

Por cierto, a ver si un día os hago un post sobre los productos de Ziaja que he probado y os digo cuales son los que recomiendo y cuáles no.

Por hoy, es todo. ¡Que paséis buen Domingo!